Antes de leer esto, tómate un minuto para mirar hacia afuera.

Observe la calma que aporta la naturaleza, poniendo nuestras preocupaciones y preocupaciones en perspectiva.

Al crecer en la Rusia rural, la recolección de hongos era una parte integral de la vida.

La alegría, las experiencias sensoriales y la mística de estos hongos fueron increíblemente especiales para mí. En mi país, los hongos se han utilizado con fines curativos durante miles de años.

De niña, tuve problemas con la piel sensible, grasa y propensa al acné, lo que destruyó mi autoestima. Como muchos otros, me sentía desconectada de mí misma y de la naturaleza.

Avanzando rápidamente hasta la edad adulta, donde me enfrenté a los desafíos de la rosácea.

Decidida a mejorar mi apariencia y salud mental, redescubrí el poder de los hongos. A base de prueba y error, aprendí a apoyar el proceso natural de curación de mi piel y desarrollé un ritual diario consciente que transformó mi piel y mi mente.

A lo largo de los altibajos de la vida, siempre he recurrido a esta práctica de conexión a tierra y a la naturaleza. La conexión entre la mente, el cuerpo y la Tierra es verdaderamente sanadora.

Nuestra piel, el órgano más grande del cuerpo, revela mucho sobre nosotros, pero a menudo se descuida. FRWRD Skincare eleva el arte del cuidado de la piel con ingredientes naturales, integrales y recolectados a mano, aprovechando todo el poder curativo de la naturaleza.

FRWRD es mucho más que solo cuidado de la piel; se trata de los sentimientos positivos que inspiran nuestros productos y rutinas.

Despertarse con alegría y gratitud, sintiéndose empoderado por su reflejo y dando lo mejor de sí cada mañana.

Se trata de los rituales y la autorreflexión que nos permiten mejorar día a día.

Queremos que te sientas conectado a tierra cuando estés frente al espejo.

Gracias por ser parte de la familia FRWRD.
 Con amor, salud y atención plena, Vladimir.